¿Eres tenista y no tienes cuenta verificada?
Con la 56ª edición del Torneo Dionisio Nespral a la vuelta de la esquina, charlamos con Roberto Menéndez, uno de los protagonistas principales de la historia reciente de este evento. Para el avilesino, actual campeón del mundo +40, el torneo organizado por el Real Club Tenis Gijón es una cita ineludible cada verano.
¿Llevas la cuenta de cuántas ediciones del Torneo Dionisio Nespral has jugado?
La verdad es que no. Sé que hice tres finales. ¿Tres finales solo? La memoria empieza a fallar. Me hago mayor (risas).
¿Cuál es tu mejor recuerdo de un Nespral?
No tengo uno en concreto. Muchos años me he sentido jugando súper bien. Sinceramente, yo creo que mi mejor tenis lo he jugado en esa pista. (Hasta ahora) el torneo era de exhibición, sin ser competición, jugaba con rivales muy buenos y yo jugaba muy tranquilo.
Todo se juntaba: había mucha gente siempre, yo jugaba en casa, el público me animaba, las condiciones (pista lenta, con humedad, bola pesada) me venían muy bien...
Me acuerdo de rachas de partidos increíbles. Por ejemplo, una final contra [Francisco] Pato Clavet, le iba ganando 6-1 4-0. Pato era súper sólido y no fallaba una bola. Todo el rato eran puntos larguísimos que yo acababa con winner. Fue un partido casi perfecto, pero al final me acabó ganando en el tercero.
He jugado otros encuentros muy buenos. Con [Tommy] Robredo hace un par de años creo que hice un gran partido, con [Albert] Montañés, Feliciano [López] o cuando le gané a Galo [Blanco]. Guardo unos recuerdos buenísimos en general.
En la final individual masculina de Wimbledon, el público animaba en masa a Federer contra Djokovic. ¿Sientes que juegas con factor campo a favor en la pista 1 del Real Club Tenis Gijón?
Sí, exacto. Hasta el año pasado, al no tratarse de una competición oficial, quizás jugaba más a dar espectáculo, que es lo que demanda el público. A la gente le gustan los golpes ganadores.
¿Encaras esta 56ª edición, encuadrada dentro de las IBP Tennis Series, de manera diferente?
Este año cambia el formato y supongo que las sensaciones también cambiarán. Hasta el momento no estoy completando mi mejor temporada. He perdido con gente contra la que no estaba perdiendo. Aunque yo físicamente me encuentre bien, las sensaciones no son las mejores. Pero quizás llegue allí [Gijón], me empiece a encontrar mejor y… ¿quién sabe?
Esta semana vas a jugar en tierra.
Sí, me voy al Campeonato de Europa +35 individual en [Baiersbronn] Alemania. Es tierra, pero en altitud [584 metros], por lo que vuela un poquitín más la bola y es más incómodo. Es complicado coger confianza si cada semana vas jugando en condiciones diferentes. Pero es lo que hay, son los torneos que he decidido jugar.
A tus 43 años sigues acumulando victoria tras victoria, la última en el ITF Seniors de Barcelona. ¿Cuáles son tus motivaciones en el tenis?
Yo me lo tomo como un trabajo. Sé que tengo que currármelo a diario. Es evidente que me gusta, pero no deja de ser un trabajo. Eso es lo que me empuja cada día a hacer mi ejercicio físico y mis entrenamientos.
Obviamente, claro que me gusta competir. La competición es el termómetro para saber cómo está mi tenis. Desde pequeñito estoy acostumbrado a competir y es algo que llevo dentro.
Los números como el ranking español, el ATP, el ITF o el nuevo UTR poco importan, ¿no?
Lo principal es disfrutar y ganar todo lo posible. Eso conduce a mejorar tu ranking. Claro que prefiero estar de Nº 1 ITF de mi categoría que estar de Nº 5. En torneos nacionales, por ir de cabeza de serie te cambian un poco los cuadros.
En definitiva, la clasificación tiene su importancia pero no le doy más valor del debido.